Día 2 Un café con Dios

Un café con Dios – Día 2

Oración: Mi Señor, antes de venir ante ti con peticiones, quiero expresarte mi inmensa gratitud por haberme dado el privilegio y la bendición de ser madre. Gracias por cada uno de mis hijos, por sus virtudes y sus singularidades. Quiero unirme a María, la madre de Jesús, y decir “mi alma alaba al Señor”

Promesa: Bendito el hombre que confía en el SEÑOR, y pone su confianza en él. Será como un árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces hacia la corriente; no teme que llegue el calor, y sus hojas están siempre verdes. En época de sequía no se angustia, y nunca deja de dar fruto. Jeremías 17: 7 – 8

Reflexión: Aquí podríamos sustituir “el hombre” por “la madre”. La primera palabra es en sí una promesa. ¿Cuál es la condición para ser bendecidas? Reflexiona en el significado de la analogía del árbol. ¿Cuál es la esperanza que el símil del árbol me proporciona?

Vuelve al Indice de contenido

Escribe tus pensamientos y reflexiones en la sección “comentarios” al fondo de la entrada. Para hacerlo necesitas crear una cuenta (registrarse) en el sitio utilizando el “login” en la ventana de la columna derecha. Los comentarios no aparecerán inmediatamente ya que serán revisados a de fin evitar abusos y spam.

Posted in Devocionales, Un café con Dios.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *